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El Santuario


Bienvenidos al Santuario Mariano de Angosto, un lugar de devoción y encuentro con la Virgen María. Es un espacio sagrado donde podrás orar, contemplar y profundizar tu relación con la Madre de Dios y se encuentra en un lugar privilegiado, rodeado de naturaleza y de una belleza inigualable, que invita a la reflexión y al encuentro personal con Dios.

Nuestra devoción mariana está inspirada en la espiritualidad pasionista, que nos lleva a contemplar la Pasión de Cristo desde la mirada de su Madre. En este lugar podrás venerar a la imagen de la Virgen María, que nos recuerda su amor maternal y su intercesión ante Dios. Además, en el Santuario se ofrecen distintas actividades de oración y reflexión para profundizar en nuestra relación con María.

Es también un lugar de peregrinación, donde acuden fieles de distintas partes del mundo en busca de consuelo y esperanza. Si deseas realizar una peregrinación al Santuario, te invitamos a contactarnos para obtener más información. Además, si deseas ofrecer una intención de oración, puedes escribirla en nuestro libro de intenciones, que se encuentra en este lugar, para que podamos orar por tus necesidades y las de tus seres queridos.

Te invitamos a visitar este lugar mariano por excelencia y a experimentar la paz y la serenidad que se respira en este lugar sagrado. Que la Virgen María te acompañe y te bendiga en tu camino de fe.

El retablo


El retablo de madera del siglo XVI está compuesto por siete paneles que representan escenas de la vida de María. En el centro del mismo se encuentra la imagen de la Virgen de Angosto que preside todo el conjunto.

La imagen


La imagen de la Virgen pertenece al tipo de las llamadas "Andra Mari". Es del siglo XIV, en madera policromada, de 82cm de altura. Su expresión de dulzura y espiritualidad resulta enormemente cautivadora. La actual imagen fue restaurada para la fiesta de la Coronación, en 1958.

Un poco de historia


El templo es una construcción de estilo gótico de la primera mitad del siglo XIV. Es de piedra de sillería, de una sola nave. En el exterior, en su cabecera consta de dos contrafuertes de esquina, y en el centro de una ventana ojival. En su parte sur destacan una puerta gótica y dos ventanas del mismo estilo.

En 1888 se efectuó una ampliación en el templo; y en la parte alta del mismo se colocó un coro conventual para la comunidad religiosa.

Entre 1980 y 1983 se hizo una restauración a fondo, con el objeto de recuperar su forma más primitiva, ganando en capacidad y luminosidad. Es el estado actual del Santuario.